Hoy en día. . .

Por: "Mantis de la Joyanca"

“Hoy en día se descuidan el equilibrio y la armonía; sin embargo, son las bases de la sabiduría. Todo se hace en exceso. La gente parece excesivamente mezquina. Se conversa demasiado sin satisfacción, se tienen demasiadas preocupaciones. Hay demasiadas ideas en blanco y negro. Todo o nada. La naturaleza no es así.”

“La naturaleza está equilibrada. La naturaleza es energía, vida y restauración. Los animales destruyen en pequeñas cantidades. Los sistemas ecológicos nunca son eliminados en masa. Las plantas consumidas vuelven a crecer. Las fuentes de sustento proveen y vuelven a reponerse. Se disfruta de la flor, se come la fruta, se preserva la raíz.”

“La humanidad no ha aprendido el equilibrio; mucho menos lo ha practicado. Se guía por la codicia y la ambición; se conduce por el miedo. Sedienta de poder. Olvida el amor, la comprensión, la compasión. Los humanos sólo destruyen. Destruyen la naturaleza, destruyen otros seres humanos. Continúan destruyéndose a sí mismos. No hay armonía ni concierto en lo que hacen.” Weiss, B. (1988). . .


“La paradoja de nuestros tiempos”

. . .Es que en la actualidad:

• tenemos edificios más grandes, pero temperamentos más cortos;
• autopistas más anchas, pero puntos de vista más estrechos
• gastamos más, pero tenemos menos; compramos más, pero lo disfrutamos menos
• tenemos casas más grandes y familias más pequeñas; más enseres, pero menos tiempo
• tenemos más títulos, pero menos sentido común
• más conocimiento, pero menos juicio; más expertos, pero más problemas
• más medicinas, pero menos bienestar
• tomamos demasiado, fumamos demasiado; gastamos descuidadamente
• reímos muy poco, manejamos muy de prisa; nos enfadamos fácilmente
• permanecemos despiertos hasta muy tarde, nos levantamos muy cansados
• leemos muy poco, vemos mucha televisión y a penas rezamos
• hemos multiplicado nuestras posesiones, pero reducido nuestros valores
• hablamos demasiado, amamos muy poco y odiamos con frecuencia
• hemos aprendido a ganar el sustento, pero no una vida
• hemos añadido años a nuestras vidas, pero no vida a nuestros años
• hemos alcanzado la Luna, de ida y vuelta, pero nos da trabajo cruzar la calle para saludar a nuestro vecino
• hemos conquistado el espacio exterior, pero no nuestro espacio interior
• hemos realizado cosas más grandes, pero no cosas mejores
• hemos limpiado el ambiente, pero contaminado el alma
• hemos partido el átomo, pero no nuestros prejuicios
• escribimos más, pero aprendemos menos; planeamos más, pero logramos menos
• hemos aprendido a apresurarnos y no a esperar
• construimos más computadoras para almacenar información, para producir más copias que nunca antes, pero tenemos menos comunicación
• estos son los tiempos de comida rápida y digestiones lentas; de hombres altos y enanos de moral; de profundos beneficios económicos y llanas relaciones humanas
• estos son los tiempos de paz mundial, pero de guerra doméstica
• de más placeres, pero menos diversión; de más clases de alimentos, pero menos nutrición

Por eso estamos como estamos. Y no somos nosotros solos, es el mundo entero que está así, Agrelot, J. (2003).